Existe diversas razones por las cuales usted debe considerar a consulta con un médico gastroenterólogo. Con el objetivo de ayudarle a identificar si usted puede estar padeciendo de alguno de ellos, nos permitimos detallarlos a continuación:
Diarrea continua: Son muchos los motivos que pueden provocar un episodio de diarrea; desde alimentos hasta infecciones o ciertos medicamentos; no obstante, si las heces evacuadas son regularmente más líquidas que sólidas, debe consultar con el especialista.
Estreñimiento: Si bien es cierto que la frecuencia de los movimientos intestinales varía de persona a persona, si estas ocurren menos de 3 veces a la semana o son muy pequeñas y duras, es considerado estreñimiento.
Acidez estomacal frecuente o grave: Un cuadro de acidez estomacal esporádico u ocasional no es preocupante y puede manejarse por cuenta propia; sin embargo, si los síntomas de presenta mínimo dos veces por semana, estos podrían reflejar la presencia enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE), una afección que, con el tiempo, puede dañar y cicatrizar el revestimiento del esófago.
Sentirse inusualmente inflamado o hinchado: La hinchazón o la sensación de llenura, principalmente en el vientre, se debe mayormente a la hipersensibilidad o intolerancia al gas en el intestino; que puede ser el reflejo de sensibilidad a ciertos alimentos o como consecuencia de estreñimiento. Otra causa puede ser alteraciones en la microbiota o flora intestinal. El gastroenterólogo puede identificar la causa exacta y remitir la opción más efectiva de tratamiento.
Dolor abdominal repentino o intenso: el dolor abdominal severo, que se prolonga por horas o que aparece repentinamente y de manera intensa, no es normal. Estos signos pueden referir la existencia de ulceras estomacales o ulceras pépticas, que son llagas en el revestimiento del estómago o primera parte del intestino delgado. Una ulcera no tratada puede causar hinchazón y cicatrices que bloquean el tracto digestivo. También pueden ser el reflejo de cálculos biliares, pancreatitis o enfermedad hepática.
Sangrado rectal o sangre en las heces: Sangre en el inodoro o al limpiarte puede indicar la presencia de hemorroides, un problema bastante común que puede tratarse con remedios caseros y medicamentos básicos. Sin embargo, cuando estas no responden a tratamientos o son muy frecuentes, son motivo de consulta porque aunque el sangrado rectal puede ser un signo de una afección médica grave, como el cáncer colorrectal.
Para una colonoscopía: Si eres mayor de 45 años de edad o tienes historial familiar de cáncer, debes hacerte una colonoscopía. La detección y tratamiento de pólipos es clave en la prevención del cáncer colorrectal.